¿Te gustan los Shiba Inu después de conocerlo a fondo en nuestra web? ¿No sabes si escoger un adulto o un cachorro? ¡No te preocupes! Hoy te queremos hablar de las diferencias reales entre adoptar un shiba inu adulto o cachorro, para ayudarte a decidirte.
¿Cuál es la diferencia entre adoptar un cachorro y un adulto?
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Como ya hemos mencionado sobre su carácter, esta raza a veces puede resultar un poco delicada de manejar, y sobre todo de educar.
Es muy importante que la educación de esta raza de perro sea muy buena, y es por eso que a la hora de adoptar tu shiba inu debes escoger muy bien.
Si no te esmeras en acertar en tu elección, el perro podría convertirse en un verdadero problema ¡y como amantes de los shiba inu nosotros no podemos permitirlo!
Conocer la diferencia entre escoger entre un adulto y un cachorro puede ser muy importante. Te adelantamos que ninguna de las dos opciones es perfecta: ambas opciones tienen sus ventajas e inconvenientes.
Ante todo, asumiremos que estamos hablando de una adopción en un criadero profesional, no a un particular (algo totalmente desaconsejado en este caso).
Opción A: Adoptar un cachorro

Adoptar un cachorro puede parecer la mejor opción de todas, pero hay que contemplar bien ante qué condiciones podemos estar exponiéndonos.
La gran y principal ventaja de adoptar un cachorro es más que obvia: son una monada. Cuando lo sostengas entre tus brazos te derretirás de amor y querrás estar siempre con él, pero esto será algo pasajero y por tanto será algo que en realidad no tiene mucho valor por sí mismo.
Un cachorro puede ser una monada, pero en lo que debemos centrarnos es en si adoptarlo a tan temprana edad será bueno para él y para nosotros. Eso tiene unos beneficios y desventajas que serán permanentes. Hay varios matices que deberíamos destacar:
Te conocerá solo a ti
Está claro que si un perro nace y al poco tiempo lo adoptas tú, serás la única cosa que conocerá en el mundo. Esto tendrá sus propios beneficios, y es que él no conocerá otra cosa que tu educación.
Esto quiere decir que la educación en un cachorro, sea de la raza que sea, es mucho más fácil. Tardará muy poco en empezar a entender las normas que tienes en casa, si sabes explicárselas adecuadamente y eres consistente. Será muy fácil enseñarle, y este es un gran plus cuando estamos hablando de una raza de este tipo.
Esto también conllevará que, irremediablemente, se llevará mejor con toda la familia. Sí, incluidos los niños. Por tanto, es más probable que se vuelva tolerante a tus hijos, dado que los conocerá desde el principio de su etapa de socialización.
Adoptar un cachorro es una lotería
Hay una desventaja importante, y es que aunque adoptes a tu shiba inu en el mejor de todos los criaderos profesionales , cabe la posibilidad de que te salga rana, dicho mal y pronto.
La realidad es que a veces la genética puede hacerte pasar un mal rato. Una pequeña tendencia agresiva del cachorro puede convertirse en un gran problema de adulto.
La conducta puede aprenderse o venir genéticamente programada, con ciertas predisposiciones. Lo cual significa que tu perro puede haber nacido así, y en algunos casos es difícil de corregir.
Por tanto, la genética es una lotería. Eso sí, es más probable que un perro sea agresivo si sus padres y abuelos lo eran. Al adoptar a un cachorro, lo más probable es que tengas la oportunidad de conocer a sus padres. Cosa que te recomendamos.
Siempre hay la posibilidad (aunque sea ínfima) de que un perro haya nacido con un problema congénito de conducta, pero conocer a sus padres te tranquilizará y te permitirá saber cómo es más probable que sea el perro.
Requerirá mucho tiempo
La parte negativa de adoptar un cachorro, es que va a necesitar muchos cuidados y atenciones por tu parte, lo cual significa en tener que invertir mucho más tiempo en él.
Al principio será un placer invertir tantas horas en él, pero poco a poco te darás cuenta de que no es algo tan agradable como parece. Tener un cachorro, igual que si tuvieras un bebé, requiere de mucha paciencia y tiempo.
¡Ahora ya conoces la parte buena y mala de adoptar un cachorro! Ahora, a descubrir qué diferencia hay con adoptar a un shiba inu adulto:
Opción B: Adoptar a un adulto

Los perros adultos tienen una obvia desventaja al adoptarse: ya son mayores.
Obviamente, han pasado ya por variadas experiencias y todo esto puede haberles condicionado. Además, ya no son tan monos, aunque reconozcámoslo: los shiba inu son monos a cualquier edad.
Puede tener problemas previos
El problema de adoptar un shiba inu ya siendo adulto, es que puedes encontrarte con un perro que ya lleva un saco de problemas encima. El tener una mala socialización o una mala educación pueden haberlo condicionado para siempre.
Al adoptar a cualquier perro adulto, de cualquier raza, esto es algo a lo que te estás exponiendo.
Ahora bien, la parte positiva de todo esto es que estarás avisado, si lo adoptas a un cuidador responsable. Lo más habitual y recomendable es adoptar perros adultos en una protectora o criadero, donde siempre te hablarán de cómo es la personalidad del can antes de que te lo lleves, para que no tengas sustos.
Una cosa que te aconsejamos es que cuando tengas pensado adoptar uno de estos perros, pidas que te dejen conocerlo en persona durante un tiempo.
En algunas protectoras puedes darle varios paseos o incluso observarlo jugando con otros perros. Todo esto te permitirá ver cómo se comporta realmente contigo y con otros perros. Saca tus propias conclusiones antes de tomar la decisión final.
Dale una segunda oportunidad a un Shiba Inu
Hoy en día hay muchos perros que están siendo abandonados constantemente. En las protectoras están siempre saturados con recogidas de perros que encuentran en mal estado.
Los Shiba Inu, al ser a veces perros un poco problemáticos, son abandonados a su suerte por dueños sin corazón. Que no los comprenden y tiran la toalla fácilmente, o que no quieren esforzarse por aprender a educarlo.
Tu ayuda, adoptando a un perro adulto de estas características, es inestimable y la recibirán con los brazos abiertos en tus protectoras locales. Además de recibir ayuda de varios profesionales de forma totalmente gratuita y hacer una obra de caridad excepcional, la adopción será mucho más económica que adoptándolo en un criadero.
Eso no es todo: el perro te estará agradecido para siempre. Esto lo hará mucho más atento hacia ti. Serás su héroe toda la vida.
Si un perro está relativamente bien socializado, se adaptará bien a nuevos contextos. Al ser un perro adulto, este se sentirá alegre de estar con su nueva familia, lo cual te garantizará su voluntad por adaptarse a esta nueva vida.
Si, además, conoces de primera mano su personalidad y preferencias mediante los consejos de sus antiguos cuidadores, no habrá sorpresas durante vuestra convivencia juntos.
Son más estables
Los perros adultos ya no son cachorros. Puede parece contradictorio, pero esto es una ventaja en sí misma.
Al ser más maduros, normalmente estarán ya educados en algunas partes de sus hábitos. Esto quiere decir que la cantidad de esfuerzo por educarlo será mucho menor que si adoptaras a un cachorro.
Los adultos raramente tendrán la tendencia a morder muebles o a hacer otra clase de travesuras tan típicas de los cachorros. También aguantará bien sus necesidades, si es algo que te preocupa.
Esto no quiere decir que te puedas encontrar con un caso contrario: un perro que no ha recibido educación ni socialización alguna durante años. Este tipo de perros, para los que deberás estar avisado y preparado, requerirán de un adiestramiento (en positivo) más intenso de lo habitual, pero conseguirás cambiar sus manías, eso seguro.
Conclusión
Como ves, las diferencias entre adoptar un adulto o adoptar un cachorro de shiba inu son muchas, y hay matices que debes estudiar con atención.
Siempre, ante la opción de adoptar a uno de estos perros deberás ser cuidadoso y sacar tus propias conclusiones, teniendo en cuenta sus propias ventajas y desventajas posibles.
Asegúrate de pedirle siempre a tu criador o cuidador de confianza todos los consejos e información que puedas sobre el perro, antes de adoptarlo o comprarlo. No te preocupes por ser pesado, de ello dependerá la felicidad tanto tuya como del perro.
¡Sigue aprendiendo de todo sobre la educación del Shiba Inu en nuestro blog!
Esta publicación me hace recordar a mi primera mascota que tuve
a mis 13 años. Era una perrita llamada Baki de raza basset de westphalie que adoptaron mis primos
en León. Una mascota curiosa.